SANTO DOMINGO.- El Movimiento Popular Dominicano (M.P.D), rechazó la visita de la jefa del Comando Sur de los Estados Unidos, Laura Janet Richardson, a la República Dominicana, al considerarla como parte de un corolario político-militar, reeditado como línea y forma de reiteración de su dominio neocolonial sobre el país.
Asegura que los pretextos, humanitarios del Buque Hospital -USNS- Comfort, para llevar a cabo servicios sanitarios, es parte de su clásica agenda liberal, como la situación de la mujer y su falsa preocupación por la explotación real de la clases obreras haitianas y dominicanas de parte del Central Romana, ingenio azucarero, de capital estadounidense.
Destaca que en el centro imperialista los trabajadores nacionales y sobre todo los inmigrantes, viven un infierno real e innegable.
El MPD precisa que la suspensión de entrada de los productos derivados de la caña de azúcar a Estados Unidos, por parte de los servicios de aduana y protección fronteriza de Estados Unidos, (CBP); por sus siglas en inglés no son más que unas mascaradas y moralinas baratas, porque no es cierto, que les preocupe el porvenir de los trabajadores dominico- haitianos.
Dijo que unido a esta politica está lo de la deportación criminal del Departamento Migración del gobierno neocolonialista y de Luis Abinader.
Por otra parte, sostiene que el gobierno estadounidense se «opone» a esa política con pura retórica y sofisma, ya que han deportado miles de haitianos que han intentado entrar a su territorio.
«Nuestra organización, revolucionaria y comunista, se opone tajantamente a las políticas migratorias y económicas de ambos gobiernos, porque entendemos que ambos tienen una misma estrategia general, la cual consiste en someter económica, política, militar y cultural a ambos pueblos hermanos, como lo son Haití y República Dominicana».
Manifestó que el inicio de esa estrategia se fortalece a partir de las invasiones del 1915 a Haití y la del 1916 a República Dominicana, no sin que ambas partes de la isla se le rechazara y resistiera.
Por otro lado, el MPD rechaza la actual política globalista de la agenda criminal de los demócratas en el poder, quienes son tan responsables y explotadores de los recursos de ambos pueblos, como los son los republicanos.
Entiende que la política para que ambas pueblos, sobre todo Haití, salga de su profunda crisis, es que las potencias extranjeras y las oligarquías rastreras de ese país dejen de crear el caos y desórden social, económico, político, diplomático y policial.
Por último reitera su opocisión a la agenda de la jefa del Comando Sur, Laura Janet Richardson y su avanzada sanitaria y «humanitaria», al igual que sus regalos navideños de juguetes militares, para fortalecer la represión a las futuras protestas populares y de masas que se originarán como consecuencia de las equivocadas y anti pueblo medidas económicas y sociales que viene desarrollando el gobierno de Luis Abinader.